El tenista argentino Juan Martín del Potro (6) se convirtió en el campeón de la vigente edición del Us Open al derrotar al número uno del mundo, Roger Federer (1), en cinco sets (6-3, 6-7, 7-5, 6-7, 2-6). Del Potro se convierte en el primer argentino en lograr un torneo de Grand Slam desde que lo hiciera Gaudio en Roland Garros 2004.
En un partido muy disputado, con momentos de brillantez para los dos jugadores, el acierto a la hora de servir acabó siendo un factor decisivo, así como la capacidad de concentración.
La primera manga se decantó en los juegos iniciales, donde Federer hizo valer su mayor experiencia para desestabilizar a su rival. Del Potro, debutante en una final del Us Open, tuvo serios problemas a la hora de meter primeros servicios y eso posibilitó que el suizo se distanciase en el marcador. No obstante, romper el saque del argentino no fue una tarea fácil para Federer, que necesitó seis bolas de break para lograrlo.
Siempre por debajo en el marcador, Del Potro intentó por todos los medios meterse en el partido, pero no logró inquietar al suizo, que se mostró muy seguro y que se limitó a esperar su oportunidad para hacerse con el set. Tras desperdiciar tres intentos sobre el servicio del argentino, Federer se valió de sus mejores armas (el saque y el juego en la red) para cerrar la manga sin apenas despeinarse.
La historia pareció repetirse en el segundo parcial, que se inició con un nuevo break a favor del suizo. Del Potro, con el recuerdo del último Abierto de Australia muy presente, buscó la reacción al resto y gozó de varias ocasiones en el para romper el servicio de su rival (0-40 en el cuarto juego), pero falló en los momentos clave y dio alas a Federer que volvió a sentirse cómodo en la pista, pese a la resistencia ofrecida por el argentino.
Sin embargo, cuando el suizo servía para llevarse la segunda manga, se produjo el resurgir de Del Potro que, esta vez sí, aprovechó la bola de break de la que dispuso para restituir la igualada en el marcador y llevar el partido al tie break, donde resolvió sin demasiados problemas para hacerse con el set.
Tras el varapalo de la manga anterior, Federer se contagió de los problemas con el servicio que había arrastrado su rival en los comienzos del encuentro y cedió terreno ante Del Potro, que se benefició de la situación para romperle el servicio en el séptimo juego. Sin embargo, poco le duró la alegría al tenista de Tandil, ya que en el siguiente tanteo Federer le devolvió el break. Se descentró entonces Del Potro y el suizo, que enlazó tres juegos consecutivos, no perdonó, anotándose el set gracias a dos dobles faltas del argentino.
El guión del cuarto set fue similar al del tercero, con una ruptura de Del Potro a la que respondió de inmediato Federer. Sin embargo, a diferencia de la manga anterior, el suizo no pudo completar la machada y se llegó a la muerte súbita, donde el tenista argentino volvió a mostrarse superior a un Federer que, en ocasiones, llegó a perder la compostura.
Descentrado tras lo ocurrido en el set anterior, al suizo le costó mucho volver a meterse en el partido y, cuando lo hizo, se encontró con un 0-3 en el marcador. A partir de ahí, al argentino le bastó con mantener el servicio y esperar a que fuesen pasando los juegos. El suizo lo intentó, pero se encontró con el mejor Del Potro de la temporada que, con este triunfo, pone la guinda (a falta de la Copa Masters) a una temporada magistral.
En un partido muy disputado, con momentos de brillantez para los dos jugadores, el acierto a la hora de servir acabó siendo un factor decisivo, así como la capacidad de concentración.
La primera manga se decantó en los juegos iniciales, donde Federer hizo valer su mayor experiencia para desestabilizar a su rival. Del Potro, debutante en una final del Us Open, tuvo serios problemas a la hora de meter primeros servicios y eso posibilitó que el suizo se distanciase en el marcador. No obstante, romper el saque del argentino no fue una tarea fácil para Federer, que necesitó seis bolas de break para lograrlo.
Siempre por debajo en el marcador, Del Potro intentó por todos los medios meterse en el partido, pero no logró inquietar al suizo, que se mostró muy seguro y que se limitó a esperar su oportunidad para hacerse con el set. Tras desperdiciar tres intentos sobre el servicio del argentino, Federer se valió de sus mejores armas (el saque y el juego en la red) para cerrar la manga sin apenas despeinarse.
La historia pareció repetirse en el segundo parcial, que se inició con un nuevo break a favor del suizo. Del Potro, con el recuerdo del último Abierto de Australia muy presente, buscó la reacción al resto y gozó de varias ocasiones en el para romper el servicio de su rival (0-40 en el cuarto juego), pero falló en los momentos clave y dio alas a Federer que volvió a sentirse cómodo en la pista, pese a la resistencia ofrecida por el argentino.
Sin embargo, cuando el suizo servía para llevarse la segunda manga, se produjo el resurgir de Del Potro que, esta vez sí, aprovechó la bola de break de la que dispuso para restituir la igualada en el marcador y llevar el partido al tie break, donde resolvió sin demasiados problemas para hacerse con el set.
Tras el varapalo de la manga anterior, Federer se contagió de los problemas con el servicio que había arrastrado su rival en los comienzos del encuentro y cedió terreno ante Del Potro, que se benefició de la situación para romperle el servicio en el séptimo juego. Sin embargo, poco le duró la alegría al tenista de Tandil, ya que en el siguiente tanteo Federer le devolvió el break. Se descentró entonces Del Potro y el suizo, que enlazó tres juegos consecutivos, no perdonó, anotándose el set gracias a dos dobles faltas del argentino.
El guión del cuarto set fue similar al del tercero, con una ruptura de Del Potro a la que respondió de inmediato Federer. Sin embargo, a diferencia de la manga anterior, el suizo no pudo completar la machada y se llegó a la muerte súbita, donde el tenista argentino volvió a mostrarse superior a un Federer que, en ocasiones, llegó a perder la compostura.
Descentrado tras lo ocurrido en el set anterior, al suizo le costó mucho volver a meterse en el partido y, cuando lo hizo, se encontró con un 0-3 en el marcador. A partir de ahí, al argentino le bastó con mantener el servicio y esperar a que fuesen pasando los juegos. El suizo lo intentó, pero se encontró con el mejor Del Potro de la temporada que, con este triunfo, pone la guinda (a falta de la Copa Masters) a una temporada magistral.
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